Adaptaciones del Hogar para Atención Domiciliaria Hospitalaria: enfermedades crónicas

Cada vez más personas requieren atención médica en casa, ya sea por enfermedades crónicas, recuperación postoperatoria o cuidados paliativos. Sin embargo, para garantizar un entorno seguro y adecuado, es fundamental realizar ciertas adaptaciones en el hogar. En este y en los próximos posts, exploramos los ajustes necesarios según el tipo de atención y las necesidades de los pacientes.

Para personas con enfermedades crónicas y para postoperatorios de mediana complejidad es necesario:

• Un espacio ventilado y con acceso a luz natural

  • Esto puede exigir adaptaciones de obra civil

• Camas ajustables o con barandillas para mayor seguridad.

  • En casos más sencillos o temporales, una adaptación de la cama existente es suficiente. Para el mediano o largo plazo, el ambiente necesita el espacio suficiente para una cama hospitalar y por veces hay que reubicar muebles empotrados

• Dispositivos para el monitoreo de signos vitales (oxímetro, tensiómetro, termómetro digital, glucómetro).

  • Aquí un mueble específico o una adecuada fijación en la pared hace la diferencia entre una organización muy funcional y el desorden.

• Mesa auxiliar para medicamentos y material médico.

  • Diseño, tamaño y ubicación adecuados facilitan las rutinas.

• Sillas cómodas con apoyabrazos

  • Son tanto una alternativa a la cama para momentos específicos cuánto sirven a la comodidad de las visitas. Hay que elegir modelos adecuados que se prestan mejor a la tarefa.

• Baño adaptado: para cuadros de mayores limitaciones de movilidad, espacio para silla de baño y para un cuidador que ayude en el aseo. Para etapas más avanzadas de recuperación, barras de seguridad en la ducha, lavamanos y sanitario.

Con esas y otras adaptaciones del hogar, el foco del tratamiento se queda totalmente en el paciente, y no en vencer limitaciones que impone el hogar. Un hogar adaptado deja de ser un estorbo y pasa a ser un gran apoyo al tratamiento.